miércoles, 15 de mayo de 2013

Un mes para los diez viajes del CTA

Ya alertaba en una entrada anterior de que las máquinas autoventa de Cercanías Renfe en las estaciones asturianas fallan en algo muy básico. Cuando acercamos la tarjeta del Consorcio de Transportes de Asturias (CTA) de diez viajes al lector nos encontramos con que la máquina nos indica los desplazamientos que nos quedan disponibles pero no la fecha en la que caducan esos viajes (un mes después de la última recarga).

La insistencia no está de más cuando se trata de una carencia muy fácil de corregir. Igual que los tornos de acceso a los andenes reconocen el 'título caducado', también puede hacer lo propio la máquina autoventa. En ella es posible recargar los títulos CTA.

A veces la insistencia en pequeños detalles como este es la que lleva a escribir una nueva entrada. Como decía:

Un mes de validez
El propósito de los títulos de viaje del CTA consiste en premiar al viajero habitual del transporte público asturiano. En el caso del Bono 10 no se trata de un viajero que lo use a diario; sino de un usuario más o menos frecuente.

El Bono 10 permite realizar una decena de viajes para trayectos que no excedan el número de zonas del CTA contratadas, considerando un mismo desplazamiento los trasbordos dentro de un determinado intervalo de tiempo. A falta de números que lo corroboren, intuyo que está desplazando considerablemente a la tarjeta Renfe&Tú, con tarifas similares y de uso exclusivo en Cercanías Renfe. La integración tarifaria es una de las bases de un transporte público eficiente.


El CTA ha impuesto una limitación a este título de transporte. Los diez viajes deben consumirse en el mes posterior a la recarga. De este modo, hay que viajar con una cierta regularidad para poder beneficiarse de las ventajas de esta tarjeta. Por ejemplo, una persona que lleve a cabo un desplazamiento de ida y uno de vuelta a la semana (ocho al mes) no entra dentro de los beneficiados por este billete integrado.

El sistema tarifario asturiano obliga a adquirir un billete sencillo a viajeros que mantienen una cierta regularidad en el uso del transporte público, aunque no sean los más habituales. Y la diferencia tarifaria es considerable. Un viaje de Oviedo a Gijón que incluya un trayecto en autobús urbano de la segunda ciudad cuesta 1,97€ con Bono 10 CTA y puede alcanzar los 4,55€ con los dos billetes sencillos correspondientes.

Bonos con o sin caducidad
Cada sistema o empresa de transporte público ha seguido ha seguido su propio criterio a la hora de decidir sobre la caducidad de sus bonos de diez viajes. En Asturias los bonotrenes de Renfe han tenido siempre esta limitación, pero los de Feve no. En Madrid, el Metrobús de diez viajes tampoco tiene caducidad.

Ofrecer más alternativas al billete sencillo puede parecer una amenaza a los ingresos ya debilitados del transporte público. Pero un Bono 10 más flexible puede suponer la diferencia entre usar y no usar el transporte público para el viajero que se desplaza "con cierta regularidad, pero no la suficiente".